187 bequerelios por litro. Los graves efectos de la radiación emitida en
el accidente de Fukushima han sido calificados de muy graves por la
propia Agencia Internacional de la Energía Atómica.
La consultoría médica RHC Japan ha afirmado que se han detectado
materiales radiactivos en la orina de 104 niños de la jefatura de
Fukushima, donde se ubica la central nuclear de Fukushima Dai-ichi, según
la cadena de televisión japonesa NHK.
La consultoría, con base en Tokio, ha recogido muestras de orina de niños
de entre cero y seis años en la ciudad de Minamisoma para comprobar los
efectos internos de la exposición a la radiación. Las pruebas se
realizar a petición de los padres de una escuela de la localidad.
De los 1.500 ejemplos que han sido analizados, un 7% de los mismos
contiene trazas de cesio radiactivo. Los niveles del material han sido
detectados en unas cantidades de entre 20 y 30 bequerelios por litro
(Bq / l), ligeramente por encima del nivel mínimo para ser detectado.
El mayor índice registrado de todos, encontrado en un niño de un año,
llegar a los 187 Bq / l. La consultoría señaló que no ha habido
exposición interna que pueda suponer un riesgo para la salud de los niños.
El director del Instituto Nacional de Ciencias Radiológicas, Makoto
Akashi, señaló que, aunque los análisis necesitan
verificación, apuntan que los niños de Fukushima han podido estar
expuestos a la radiación interna.
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